Code Lyoko Temporada 5 (4)

                                        Capítulo 4-El baile de otoño

En Kadic parecía ser un día corriente, al igual que los demás pero no era así, todos los alumnos comentaban sobre el baile que se celebraría allí esa noche.

En casa de Yumi…

-¡¿Cómo?!- gritó Yumi, no se esperaba una noticia así tan de repente, ella ya había oído hablar de ese tema pero no se imaginaba que ese día lo volvería a ver- está bien, esta noche no asistiré al baile y me quedaré en casa.

-Siento decírtelo hoy, pero no hace falta que te quedes en casa, podríais ir juntos al baile y presentarle a tus amigos, seguro que se llevan muy bien- sonrió Akiko.

-Qué ganas….bueno,  ahora nos tenemos que ir, adiós- se fue con Hiroki cabizbaja, tendría que dar muchas explicaciones.

Mientras iban hacia la escuela Hiroki empezaba con una de sus típicas conversaciones raras que ponían de los nervios a su hermana.

-Oye Yumi- atrayendo su atención.

Pero ella no estaba de humor para aguantarlo esa mañana- Mira Hiroki no me apetece en absoluto pensar en si preferiría ser un martillo o un hacha así que estate calladito hasta que lleguemos ¿vale?- fue directa, pero el no se daría por vencido tan fácilmente, si no quería hablar de eso hablarían de otra cosa.

-Entonces prefieres hablar sobre de que forma le darás plantón a Ulrich- preguntó con una sonrisa, ya habían llegado a Kadic y su hermano salió corriendo.

-¡¿Quién te ha dicho que yo le tenga que dar plantón a nadie?!- gritó histérica, pero una voz a su espalda la asustó.

-¿Quién le tiene que dar plantón a quién?- preguntó interesado Ulrich, al reconocer esa voz a Yumi se le erizaron los pelos de la nuca, ¿tan pronto habían llegado a la academia? Quizás era porque venía discutiendo con su hermano- nada, son tonterías de mi hermano.

Un momento después los demás también aparecieron detrás de el, al parecer ya habían acabado de desayunar.

-Qué Ulrich ¿ya le has dicho a Yumi que vaya contigo al baile?- soltó de improvisto Odd, Ulrich le dirigió una mirada glacial indicándole que no debería haber dicho eso- ¡Anda! Pero si es Sarah- señalando a una chica que pasaba cerca de allí- lo siento pero tengo que irme- salió corriendo con el rabo entre las piernas.

-A… sobre eso, tengo algo que decirte Ulrich- puso cara de disgustada- Lo siento pero esta noche no podré ir contigo- Ulrich no decía nada, solo se limitaba a mirar al suelo en silencio total- verás, ayer llegaron desde Japón unos…- no la dejó acabar.

-¿Déjalo quieres?- pidió con una voz neutra- no tienes por que darme explicaciones, si no quieres ir conmigo, no quieres y se acabó- se dio la vuelta con intención de irse pero antes añadió- tú y yo solo somos amigos, ¿recuerdas? No hay razón para ir conmigo- se marchó.

-Será mejor que lo dejemos solo un rato, pero tenemos que irnos a clase- dijo Jeremy.

-Espérame allí, ahora voy- dijo para poder quedarse a hablar con Yumi. Él asintió con la cabeza y se fue saludando con la mano.

-¡Es un cabezota!- comentó Yumi mientras las dos se sentaban en un banco- no puedo creer que no me haya querido escuchar- con tono medio enfadado medio triste.

-Yumi, yo quiero saber la razón- insistió Aelita, ella la miró y le dedicó una sonrisa, sabía que podía contar con Aelita para cualquier cosa.

-Bueno… ellos vinieron ayer y como solo se quedaran hoy de visita me han dicho que debo venir con Ryo al baile- explicó.

-Tienes toda la razón, Ulrich puede llegar a ser muy cabezota- concluyó- Si te hubiera escuchado, ahora no se sentiría tan triste.

-Ya no tiene importancia, si quiere deprimirse, que lo haga pero yo no he tenido nada que ver, el solito se ha montado su historia. Ahora será mejor que nos vayamos o llegaremos tarde.

Con Ulrich…

“Así que prefiere ir con otro, tenía razón, ella no siente nada por mi”- pensaba mientras caminaba por el pasillo rumbo a clase.

A la hora de comer…

Yumi y Ulrich estaban sentados cada uno en una punta de la mesa, no se habían vuelto a dirigir la palabra desde esa mañana.

-¿Ha pasado algo entre estos dos?- se dio cuenta Odd.

-¡Valla! Pero si te has dado cuenta, creíamos que con tanta comida por delante no lo ibas a adivinar nunca- empezó a reír Aelita.

Todos seguían comiendo en silencio, había mucha tensión en el ambiente y para empeorarla aun mas aparecieron al de un rato cerca de Yumi, Hiroki y Johnny.

-Yumi- empezó diciendo- ya sé que soy un poco joven y que preferirías a alguien de tu edad, pero ¿querrías ir al baile conmigo?- preguntó avergonzado.

-Lo siento Johnny- dijo con una voz muy dulce- pero debo ir con otra persona- el asintió

Por su parte Ulrich solo seguía mas molesto, ¿Qué se creía ese crío para pedirle ser su acompañante si ni siquiera el podía serlo?

-Ya te había dicho yo que no iba a ir contigo- respondió Hiroki- ni siquiera Ulrich a podido convencerla de que vaya con él…-los dos se fueron de allí, gracias a ese comentario las miradas de los dos se cruzaron causando un sonrojo pero seguido cada uno miró hacia un lado evitando al otro.

-Será mejor que regrese a casa y me prepare, los invitados están a punto de venir- se fue Yumi.

Quién si no otra que Sissi se acercó a ellos como los buitres aprovechando la situación, al parecer se había enterado de que Yumi iba a ir con otra persona.

-Hola querido Ulrich, es una pena que esa flacucha no pueda ir contigo, corren rumores de que va a ir con un antiguo novio suyo- se inventó con malicia.

-¿Qué quieres?- preguntó enfadado pero solo consiguió que Sissi soltara una sonrisa al ver como su enfado había aumentado a causa de su mentira.

-Bueno…no tienes pareja y no querrás quedar mal delante de todo el colegio ¿no?- dijo intentando tentarle.

-Está bien, iré contigo si me dejas en paz- con voz queda, siempre tenia que aparecer la pesada de Sissi. Pero se fue de allí con la cabeza bien alta por su logro.

-¿Lo dices en serio?- preguntaba Odd incrédulo.

-Ulrich no me parece que sea la mejor solución, y deberías dejar que ella te explicara las cosas- insistió Aelita, no solo la relación entre ellos dos podría complicarse, si no la de todo el grupo.

-La verdad es que no se ni yo como he aceptado ir con ella pero no quiero hablar mas de ese tema, me voy- salió de allí un poco enfadado.

-¡Ah! Se me olvidaba deciros- intervino Jeremy- Aelita se ilusionó pensando que le pediría ir al baile con el- ya he actualizado el programa para detectar torres activadas- la cara de Aelita cambió rotundamente y Odd pareció darse cuenta de la situación.

-Jeremy, Jeremy, Jeremy-movió Odd la cabeza de un lado a otro con signo de negación- con lo listo que eres y ¿aun no te has dado cuenta de que Aelita está esperando que le pidas ir al baile?- se levantó y se fue dejando a los dos colorados a mas no poder.

-A-Aelita, qui-quieres ir conmigo a-al b-baile?- preguntó olvidándose de el otro tema por completo.

-Si Jeremy- abrazándolo con todas sus fuerzas.

En casa de Yumi…

Entró corriendo y se fue ha su habitación dando un portazo.

-Cómo odio a Hiroki, solo sabe molestar- se quejó, estaba enfadada pero también tenía ganas de ver a Ryo, era un antiguo compañero, y eran muy buenos amigos cuando eran pequeños así que se levanto, se dio una ducha bien caliente y se puso un vestido de color negro que le llegaba por las rodillas y unos zapatos del mismo color pero sin tacón. El pelo decidió recogérselo en un moño dejándose únicamente dos mechones sueltos y adornando el mismo con una flor blanca y negra.

Eran ya las siete y media y el timbre acababa de sonar cuando Yumi bajaba las escaleras cuando la puerta fue abierta por sus padres, entró Ryo quedándose petrificado al verla de esa forma, estaba muy guapa, y había cambiado tanto…

A ella en cambio el también le parecía mas atractivo pero no lo veía como novio si no como un buen amigo de la infancia que nunca olvidará, vestía una camisa blanca adornada con una pequeña corbata negra, dándole un toque mas serio y maduro, junto a unos pantalones oscuros, su pelo de color negro caía rebelde sobre sus ojos claros.

-Yumi…-susurró el chico reaccionando lentamente.

-Hola Ryo- saludó ella con total naturalidad- ¿Qué tal el viaje?- preguntó dirigiéndose tanto a el como a sus padres.

-Muy bien pero como ya te habrán dicho solo estaremos aquí esta noche.

-Si, ya me lo habían dicho…bueno ¿damos una vuelta en vez de ir al baile?- intentó escaquearse, a ella no le gustaban para nada los bailes

-No, preferiría que fuéramos tengo ganas de conocer a tus amigos, y sería una pena habernos arreglado tanto para dar solo un paseo- convenciéndola.

-Vale, vale, iremos al dichoso baile.

En la habitación de Ulrich y Odd…

-Estoy que hecho chispas eee- se halagaba Odd a sí mismo- seguro que con lo guapo que estoy ligo un montón esta noche-ilusionándose. La verdad es que estaba bastante bien, una camisa de color morado claro con cuadros blancos y un pantalón un poco más oscuro atado con un cinturón.

-Si claro, por eso es que no tienes pareja para esta noche- le respondió Ulrich que también acababa de vestirse: Un camisa con un bolsillo en la parte del pecho de color verde pistacho y unos pantalones verde oscuros (estilo de los que llevaba en las primeras temporadas).

-¿Sabes?- le replicó Odd- prefiero ir solo al baile que con esa descerebrada de Sissi.

-Te he dicho que no me hables mas de ese tema, ni siquiera yo se porque le dije que si-levantándose de la cama- pero ahora tengo que ir a buscarla.

-Yo también me voy, no me quiero perderme a Jeremy bailando- soltando algunas risitas.

Ulrich llamó a la habitación de Sissi, la verdad es que se le habían quitado todas las ganas de ir a ese estúpido baile, pero no dejaría que Yumi pensara que se ha echado atrás porque no quería ir con el. La puerta se abrió y Sissi salió con un vestido azul oscuro de tirantas y el pelo suelto amarrado por una diadema.

-Ya estoy lista querido Ulrich, ¿Qué te parece? ¿Verdad que me sienta bien?- peinándose el pelo, pero el apenas le había mirado una vez.

-Si, lo que tu digas pero vámonos ya- cogiéndola de la mano y llevándosela de allí.

En el baile…

El gimnasio estaba muy bien adornado, con muchos focos de distintos colores, un escenario de estatura media colocado al fondo y varias mesas con refrescos a un lado dejando sitio a la pista de baile. Un grupo de música llevaba un rato tocando algunos temas y la mitad de los alumnos se encontraban allí.

Aelita y Jeremy habían parado de bailar para tomar algo, y Odd también estaba allí parado junto a ellos.

-Este baile es un chasco- se quejaba continuamente.

-Eso ya lo has dicho antes- le replicó Aelita- ¿no será por casualidad porque no tienes pareja aún?- se rieron de él.

-Ja, ja muy gracioso- fingió reírse, de repente paró en seco y abrió la boca al mismo tiempo que señalaba a la entrada- pero si es Yumi- logró balbucear.

Yumi les vio en una esquina y se dirigió hacia ellos con su acompañante.

-Hola chicos- saludó alegre- el es Ryo Tsukimoto y fue uno de mis mejores amigos- se paró y se giró hacia Ryo- ellos son Aelita, Jeremy y Odd- los cuatro se saludaron.

-Encantado de conoceros, Yumi, ¿te apetece ir a bailar conmigo?- preguntó con una sonrisa esperando que le diera un si.

-Sólo porque hace años que no te veo- le cogió la mano y se fueron a la pista, pero antes dijo algo a Aelita- Por cierto, me encanta como vas Aelita- sonrió.

Aelita se sonrojó tras el comentario de su mejor amiga, según ella no estaba tan bien como Yumi. Su vestido rosa carmín con tres botones amarillos y volantes hacía juego con un pequeño lazo del mismo color que adornaba su pelo- tú también estas muy bien- gritó para que la oyera.

Al de un rato Sissi y Ulrich hicieron su entrada dejando a todos alucinados, nunca pensarían que el acabaría yendo con esa borde, mientras tanto Aelita rezaba para que Yumi no se diera cuenta pero era una misión imposible, pues Sissi no dejaba de llamar la atención continuamente y un pelotón de alumnos se amontonó en la entrada.

-Ahora vuelvo- dijo de repente Yumi a Ryo- vete de mientras con mis amigos, saldré a tomar un poco el aire- salió corriendo pasando por al lado de Ulrich, quien se quedó alucinado por lo guapa que estaba, pero notó un aire triste en su mirada. Alguien lo sacó de sus pensamientos mientras lo abrazaba.

-¿Porque no vamos a bailar querido?- preguntó Sissi

-Vete tú. Yo ahora voy contigo- la dejó allí y se fue a por un refresco donde se encontraban los demás, al acercarse vio también a otra persona que no conocía- ¿Quién eres tú?- preguntó con un tono desagradable.

-Tranquilo tío, el es Ryo el acompañante de Yumi- esas palabras le recordaron algo.

-Y ¿que se supone que hay entre Yumi y tú?- parecía que iba a saltar sobre el para pegarle.

-Podrías ser más amable, pero ellos dos son solo amigos- ayudó Aelita intentando deshacer un poco toda aquella tensión.

-Y que más…-decía sin creérselo.

-Tú mismo si no te lo crees, pero yo he venido desde Japón para mudarme a otra ciudad, solo estoy aquí de paso, Yumi y yo fuimos muy buenos amigos y queríamos hacerle una visita a ella y su familia.

Ulrich al afirmar sus sospechas abrió tanto sus ojos…no se lo podía creer, tanto ella como Aelita le habían estado diciendo la verdad y el a parte de no escucharlas se había comportado como un idiota al ignorarlas. Seguramente Yumi estaba triste por eso, tenia que ir a buscarla- a dónde ha ido Yumi- dirigiéndose a Ryo.

-Creo que salió a tomar un poco de aire, yo también iré a buscarla- salieron de allí juntos pero luego se separaron y cada uno tomó un camino diferente.

-Jeremy- llamó su atención Aelita- ¿te aseguraste de mirar que no había ninguna torre activada?- preguntó con desconfianza, pero al ver su cara supo que había hecho bien preguntando.

Los tres se miraron entre si y salieron corriendo hacia las habitaciones. Pero una voz fuerte los detuvo.

-¿Qué hacéis vosotros aquí?- preguntó Jim detrás de ellos.

-Solo nos olvidamos algo en mi habitación y queríamos cogerlo- respondió Jeremy.

-No me importa lo que se os haya olvidado, no podéis estar aquí, fuera- señaló con el dedo hacia el gimnasio.

-Yo me ocupo de esto, si pasa algo avisadme- les guiñó un ojo Odd, se dirigió hacia Jim y comenzó mientras lo empujaba hacia fuera- Jimbo, hay unas cuantas alumnas en el gimnasio que quieren que les des clases de baile- se inventó, pero el parecía habérselo creído, y olvidado del otro tema, por lo que Aelita y Jeremy llegaron a su habitación.

-¡Oh no! Una torre activada- gritaron los dos.

Con Yumi…

-Será imbécil- se repetía una y otra vez, estaba sentada al pie de un árbol estrechando sus piernas contra ella con sus brazos, se encontraba triste y muy furiosa, pero todo esto desapareció al oír pasos detrás de ella- ¿Quién está ahí?- preguntó sin miedo, pero como nadie contestaba se giró- Ryo…-fue su única respuesta antes de caer inconsciente. De las manos de él, aparecieron una especie de rayos que le dieron de lleno.